Ritual para liberarse de la mala suerte 

¿Temes que te hayan echado un mal de ojo? ¿Últimamente tienes mala suerte? Si las cosas no te salen bien haz este ritual, notarás la diferencia.

Es un ritual muy sencillo de hacer y los ingredientes necesarios son muy fáciles de encontrar.

Necesitamos: • 4 almendras grandes, más o menos del mismo tamaño, las cuatro deben estar peladas.
• 1 Vara de incienso.
• Esmalte de uñas de color negro.
• Una bolsita de algodón pequeña.
Para empezar este ritual, debemos encender el incienso y coger cada una de las almendras y ahumarlas.

Cuando las almendras estén listas y ahumadas debemos coger el esmalte de uñas negro y con él debemos hacer una flecha señalando la parte más ancha de la almendra. Repetimos esta operación con cada una de ellas.

Seguidamente debemos dejar que el esmalte se seque, y una vez seco, debemos coger las cuatro almendras y colocarlas dentro de la bolsita de algodón.

Por último, debemos colocar la bolsa de algodón colgada en tu armario de ropa y adiós a la mala suerte.


La dualidad del gato como símbolo de la divinidad y de la representación demoníaca, dio lugar a que en las supersticiones relacionadas con él se le considere representante de la mala o la buena suerte, según la circunstancia o lugar en que naciesen.
Se dice que un gato negro es realmente un vaticinio nefasto, si se cruza en el camino de una persona de derecha a izquierda. También que pierde este carácter de maldad si tiene un lunar blanco en alguna parte del cuerpo.
Existen pueblos en que el encuentro de un gato negro camino de la iglesia el día de la boda da buena suerte, mientras que en otros es símbolo de desgracias conyugales.
Se cree que el gato negro trae buena suerte en los juegos de azar, sobre todo si se toca alguno antes de que empiece el juego.
También se cree que tener un gato negro en casa es símbolo de buena fortuna.
Otra superstición mantiene que encontrarse un gato (no importa el color, sino la dirección) viniendo de cara por el camino trae buena suerte, mientras que verlo de espaldas trae mala suerte. Asimismo, es de buen augurio que un gato nos adelante en el camino.
Cuando un pescador sale de pesca, considera de buen augurio que un gato le preceda, pero muy malo si se le cruza en su camino.

La gente del mar suele estar muy atenta al comportamiento del gato a bordo. Es tradición popular que si el gato corre, juega o salta pronostica tormentas y galernas; si se arroja el gato por la borda o es ahogado en el mar sobrevendrán calamidades al navío y su tripulación.